domingo, 9 de noviembre de 2008

NADA LES PARECE BIEN

Si no hubiese estado España presente en la cumbre del G-20, la derecha española habría puesto el grito en el cielo. Ya lo venía avisando. Ahora que se ha confirmado que España estará presente con voz y voto, con todos los derechos, al igual que el resto de países que asisten, tampoco están conformes.

Empezaron poniendo en duda, la forma de la presencia. Si estábamos, porque Francia cedía uno de sus puestos, resulta que no habíamos sido capaces de conseguirlo por nosotros mismos y, para el colmo de despropósitos del PP, llegan incluso a decir que era una vergüenza que en el segundo centenario de la invasión de España por Napoleón aceptásemos semejante invitación.
De verdad que los argumentos del PP no tienen precio. Claro, que ellos con tal de echar basura contra el Presidente del Gobierno hacen lo que sea: mienten, engañan, tergiversan la verdad. La cuestión es intentar desgastar al Gobierno de España, aunque con ello se pueda poner en peligro la estabilidad del país. Lo vienen haciendo con la economía, lo hacen ahora con la presencia de España en el G-20, lo hicieron en su momento con el terrorismo, en fin el caso es empozoñar la vida política de nuestro País.
Si escuchamos, a los dirigentes de Europa y América, vemos la alegría que ha supuesto para ellos que España esté presente en la cumbre. No en vano es la octava potencia mundial. Claro que en el exterior creen más en nuestro sistema financiero y en nuestras posibilidadades económicas, así como en la forma de resolver los problemas, que el propio Partido Popular.
Lo que está claro es que se están haciendo las cosas bien. El Gobierno, con José Luis Rodríguez Zapatero a la cabeza, ha hecho unas gestiones, que podemos calificar de brillantes para conseguir que España esté en la cumbre. Igualmente se están haciendo las cosas bien en economía, puesto que se toman medidas claras y que benefician a quien más lo necesita. Pero claro, eso al PP no le sirve, a ellos nada les parece bien. Todo está mal hecho. No se miran a ellos mismos, puesto que si lo hicieran se darían cuenta que critican mucho pero soluciones nada, salvo las de siempre, ir contra los más necesitados. El gobierno, al contrario, toma medidas que ayudarán a salir de la crisis y apoya a las personas con menos recursos. Esa es la diferencia entre un partido progesista y un partido de derechas: Uno se preocupa por los problemas de los ciudadanos (el PSOE), al otro (el PP) le importan las personas lo que se dice nada. Así les va y les irá en el futuro

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