Cuando le preguntan a la Sra. Cospedal sobre la reunión de Camps y Rajoy en el Parador de Alarcón, contesta sin inmutarse que se acaba de enterar por quienes le están preguntando. Y ante la insistencia de los periodistas en cuanto a si se siente desautorizada, nada menos que contesta que no entiende la pregunta.
Y esta es la persona que se dedica a insultar al Presidente Zapatero, a policías, jueces y fiscales y se queda tan tranquila. Contestará con el tiempo que se acaba de enterar o que no entiende lo que le preguntan. Claro que siempre que las preguntas le resultan incómodas o contesta con evasivas o simplemente no admite las preguntas y se marcha.
Luego va por algunos sitios de Castilla-La Mancha propugnando su liderazo. ¿De qué liderazgo habla? De futuro difícil, porque si le desautoriza hasta el líder de su formación con quien estuvo reunida horas antes hablando del caso Gürtel y de la suciedad que el PP de Valencia ¿qué capacidad tiene para liderar un proyecto político en esta región? Pienso que ninguna, porque una persona que es la segunda de del PP nacional y que no se entera de nada no puede pretender liderar una región de la que no conoce prácticamente nada, aunque lo pretenta con sus esporádicas visitas a algunas localidades.
Es hora ya de que no nos callemos de que digamos claramente quien es esta persona que, según el PP algún día regirá los destinos de los castellano-manchegos. Pero conforme la vamos conociendo nos damos cuenta que le falta capacidad y sentido común para dirigir una tierra que necesita gente comprometida como el Presidente Barreda que sí sabe lo que hay que hacer por la región, se preocupa de ella y de sus gentes y resuleve los problemas que surgen.
De hecho este mes esta región ha sido donde el paro más ha descendido. Pero, la Sra. Cospedal, lejos de alegrarse, cuando le preguntan se va con cara de pocos amigos para no contestar. Es que a ella le hubiese gustado que en Castilla-La Mancha el paro hubiese subido, que los castellano- manchegos estuvieran peor, y así poder arremeter como suele hacer contra el gobierno del Presidente Barreda. Pero si ve indicios de que las cosas van mejor entonces se coge una rabieta, no contesta y se marcha.
Esta es la persona que el PP tiene como líder en Castilla-La Mancha, una persona más preocupada por su imagen, que por los castellano-manchegos, una persona que se dedica a insultar, a intentar que las cosas vayan cada vez peor en esta región, un persona que con sus declaraciones y su forma de actuar contra todo lo que puede intenta derribar el edificio con tal de quedarse con el solar arañando unos pocos votos con sus incendiarias declaraciones. Esta persona no puede seguir y lo mejor que podría hacer es marcharse y dejar que otras personas en esta región dirigiesen el PP que se merece mejores dirigentes que se preocupen por lo que ella y sus aduladores no se preocupan, por esta región.
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